miércoles, 28 de agosto de 2013

La familia lasallista se fue de fiesta y olvidó el reloj

Los lazos que inician en las aulas de un colegio, desde la infancia, esos son los que soportan cualquier embate.

Los chicos lasallistas lo saben y han convertido esa amistad en la mejor excusa para consolidar una gran familia, que cada año tiene su gran y ansiada reunión en la fiesta de exalumnos. Este 2013, los organizadores fueron los 60 integrantes de la promoción 1988, que cumplen sus bodas de plata.

El salón Sirionó de la Fexpo abrió sus puertas a 1.500 personas que no quisieron perderse la cita denominada Nuestro tiempo, en honor a la vocación de aporte a la comunidad que caracteriza a los miembros de la gran familia lasallista.

La alegría era imposible de disimular, los hermanos de aulas brindaron por el rencuentro, mientras la música del grupo Ley C-k y de dos DJ contribuía a intensificar este sentimiento. También hubo la euforia de La hora loca y la animación de Reyes Seleme, que justificaron dejar abandonado al reloj en casa

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