La sede fue el domicilio de Sonia Rivero, quien las recibió con un bufé de pastas y ensaladas para chuparse los dedos.
El jardín fue el lugar propicio para que este divertido grupo continúe con la tertulia después de la cena.
En medio de risas y fotos para que mueran de envidia los ‘del grupo’ de WhatsApp, las amigas se pusieron al día, prometiendo volverse a juntar en una próxima oportunidad